| Los 'President Daily Briefings' no merecen tanta mayúscula, a juzgar por la atención que les dedica Donald ... ͏ ͏ ͏ ͏ ͏ ͏ ͏ ͏ ͏ ͏ ͏ ͏ ͏ | Los 'President Daily Briefings' no merecen tanta mayúscula, a juzgar por la atención que les dedica Donald Trump. La NBC News publicó hace unos días que la directora de Inteligencia Nacional, Tulsi Gabbard, estaría pensando en una solución drástica: convertir las sesiones diarias de información al presidente en «transmisiones tipo Fox News» porque él «no lee». Para llevar a cabo este plan, Gabbard pensaría contratar a un productor y a un presentador de la cadena favorita del republicano. ¿Qué podría salir mal? De este modo, Trump quizá se enteraría de lo que su equipo quiere transmitirle. Claro que a la vez se enterarían los 'elegidos' de Fox News, que ganarían (más) acceso a información clasificada, con su acreditación de seguridad y todo. | | | Entretanto, en el mundo real, las guerras continúan. | | | Delegaciones de Ucrania y Rusia se han citado a las 13.00 horas para su segunda ronda de conversaciones en Estambul. Al frente de los ucranianos, de nuevo el ministro de Defensa. Por los rusos, los mismos que en la anterior ocasión amenazaron incluso a las familias de sus adversarios. | | | El ambiente está muy enrarecido por el ataque innovador que ayer lanzó Ucrania contra al menos cuatro bases aéreas en territorio ruso. Bien adentro: hasta 4.700 kilómetros de distancia alcanzaron los drones ucranianos, no en vuelo, sino después de ser cómodamente transportados en falsos techos de camiones que entraron en los dominios de Vladímir Putin probablemente desde Kazajistán, por donde se cuelan la mayoría de envíos para eludir las sanciones internacionales. | | | Ya saben, 'operación telaraña', hasta 150 drones, de los que poco más de un centenar alcanzaron sus objetivos: bombarderos estratégicos lanzamisiles, de esos que cada noche castigan la capital y otras ciudades del país invadido. Un artefacto que cuesta unos 600 euros puede destrozar un aparato de 100 millones con disparar a sus alas llenas de combustible. No deja de asombrar ver cómo despegan los drones de los techos de los vehículos pesados. Y cómo la población local trata de detenerlos lanzándoles piedras, a falta al parecer de una defensa más convencional. | | | El ataque se produjo el día que se cumplían 29 años de la entrega por Ucrania de todo su arsenal nuclear a Rusia, en virtud de un Protocolo de Budapest reiteradamente violado por Putin. Volodímir Zelenski detalló anoche que la operación «absolutamente brillante» se preparó durante «un año, seis meses y nueve días». Además de la enorme mancha para el ejército ruso y sus responsables políticos, el enjambre de drones y la manera de desplegarlos supone ahora una exigencia de mayor control en la logística del invasor. Y una advertencia al resto del mundo sobre la capacidad destructiva de este armamento. Cuando en un conflicto un bando logra el dominio con drones, la vida del adversario de vuelve más difícil y costosa. | | | El jefe de la delegación rusa en Estambul, Vladímir Medinski, prefirió no valorar a su llegada a Turquía la hazaña ucraniana. «Mañana, mañana», dijo, por hoy. A ver qué pasa, aunque la esperanza de un alto el fuego es escasa. Después de más de tres años de guerra, el Kremlin no ha logrado ninguno de sus objetivos. Quizá por eso su ministro de Exteriores, Lavrov, anda reclamando «una Ucrania no nuclear y neutral». Así era el país invadido el 22 de febrero de 2023 cuando, como diría Trump, Putin se volvió loco. | | | Y un par de preguntas clave, es un decir: ¿Tiene la Casa Blanca algo que decir sobre el ataque a las bases rusas, además de que Kiev no le informó con antelación? ¿Habrán reparado Trump y Vance en que, en su reciente visita a Berlín, Zelenski llevaba lo más parecido a un traje que le permite su ascética indumentaria táctica? | | | En Gaza, todo indicaba que el 'nuevo' sistema de distribución de suministros -porque ayuda humanitaria no es- sería un fracaso. Y los peores temores se han cumplido. Mercenarios estadounidenses y militares israelíes vigilan un reparto limitado de alimentos secos, que probablemente sus destinatarios no podrán cocinar por falta de agua y combustible. De medicinas no se habla. | | | Médicos que conocen el trabajo en la Franja, como el británico James Smith, hablan de «coartada humanitaria» para distraer de los continuos bombardeos sobre tiendas de refugiados e infraestructuras, alguna todavía queda en pie. En cinco días de actividad de la Gaza Humanitarian Fundation y según las organizaciones internacionales, al menos 49 civiles murieron y otros 300 resultaron heridos en las aglomeraciones para conseguir comida. La promesa de ayuda se convierte a menudo en una trampa para miles de civiles hambrientos y exhaustos después de caminar durante horas. | | | De las negociaciones para un alto el fuego, mejor no hablar. Y la colonización de Cisjordania avanza a buen ritmo. | | | «Espero que Greta y sus amigos sepan nadar». Con esta salva, de momento verbal, saludó el senador republicano de EE UU Lindsey Graham la nueva misión de la 'flotilla de la libertad'. La embarcación 'Madleen' partió ayer del puerto siciliano de Catania con el objetivo de romper el bloqueo israelí de Gaza. A bordo viaja el icono ecologista Greta Thunberg, de ahí la referencia del senador Graham, que podría tomarse a broma si no existiera un mal precedente. El anterior intento de llevar ayuda a la Franja, el del barco 'Conscience', fracasó a comienzos de mayo, víctima de un ataque con drones que, por supuesto, «se está investigando». | | | | |
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