Querido lector: Hoy la actualidad de los periódicos españoles ha orbitado en torno a dos asuntos: el cónclave, naturalmente, y la comparecencia de Pedro Sánchez en el Congreso, dos circunstancias que son bastante infrecuentes (cada una en su estilo, claro está).
Como era de esperar, todavía no conocemos al sucesor de Pedro. La primera fumata ha sido negra, así que mañana será un día intenso de votaciones (podrían ser hasta cuatro).
Por otro lado, en el Congreso da la sensación de que es imposible avanzar nada y que solo hay movimiento (casi siempre para mal) cuando Carles Puigdemont levanta el pulgar.
Justo a las 21 horas ha empezado a salir el humo tras la primera vocación del cónclave. Como era de esperar, aún no se ha alcanzado la mayoría necesaria de dos tercios.
Nada nuevo bajo la cúpula del Congreso: el Gobierno lo hizo bien (según ellos) y el pueblo español dio un ejemplo de civismo. Los mismos tópicos de los últimos nueve días.
Y tras la defensa de lo indefendible llegó el mensaje polarizante de hoy: críticas a la nuclear, a los ricos... Al ritmo que vamos acabarán culpando a Juan Roig de dejarnos sin luz.
La Fiscalía perdió buena parte de su prestigio cuando, directamente, dijo que no se investigase a Begoña Gómez. Presunción de inocencia por delante (como siempre) hoy recaen sobre ella imputaciones muy graves y algunas pruebas de lo más elocuente.
Un año más, El Debate quiere distinguir a aquellas personas e instituciones que llevan el buen nombre de España más allá de nuestras fronteras. La entrega de los premios será el lunes 26 de mayo en el hotel Four Seasons de Madrid.
Muchas gracias por llegar hasta aquí una noche más. Quién sabe si mañana a esta misma hora tendremos ya un nuevo Papa. Sea como sea, contamos con tu visita. Que descanses.
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